Los ciudadanos asisten a las urnas para elegir al nuevo mandatario y revertir la crisis que se generó con el golpe de Estado. Anoche hubo explosiones en escuelas y otros hechos de violencia
Honduras hoy elige a sus próximos gobernantes, en unas controvertidas elecciones generales, en medio de un ambiente teñido por algunos hechos de violencia.
Más de 4 millones de hondureños fueron llamados a votar. Las escuelas abrieron sus puertas a las 7 de la mañana local (GMT-6) y estarán abiertas hasta las 17 horas.
El clima es tenso, según publican medios opositores al régimen de Micheletti y festivo, dicen los que esperan que las elecciones den un respiro a la crisis política que vive el país, uno de los más pobre en Latinoamérica.
El depuesto presidente Manuel Zelaya, llamó a abstenerse en los comicios y aseguró que impugnará los resultados de las elecciones.
Por otro lado, ayer las autoridades informaron la detonación de un artefacto explosivo en una zona comercial de la norteña ciudad de San Pedro Sula, y de otra que habría causado daños en una escuela de la población de Lepaera, en la provincia de Lempira. Las escuelas son tradicionalmente utilizadas como centros de votación en el empobrecido país centroamericano de 7.8 millones de habitantes. Además también se reportaron daños por un explosivo en la sede de una emisora de radio en la capital, Tegucigalpa.
Ninguna de las detonaciones dejó víctimas, pero se sumaron a cuatro atentados contra centros de votación ocurridos el viernes en San Pedro Sula. La noche del viernes, militares dispararon contra tres hombres que viajaban en una camioneta y no se detuvieron en un retén ubicado cerca del Estado Mayor del Ejército, a pocas cuadras del centro de Tegucigalpa.
Organismos que tradicionalmente observan las elecciones de la región, como la Organización de Estados Americanos (OEA) y el estadounidense Centro Carter, no enviaron delegaciones a los comicios hondureños. Nicaragua, vecino de Honduras y cuyo presidente, el izquierdista Daniel Ortega, recibió a Zelaya después del golpe, cerró de manera "preventiva" su frontera el sábado, hasta las 18 del domingo, dijo a Reuters una fuente de inteligencia nicaragüense, que solicitó el anonimato.
El golpe de Estado fue condenado globalmente y Honduras quedó aislada del mundo mientras Latinoamérica y Estados Unidos, entre otros, exigían la restitución de Zelaya. Pero Washington, así como los gobiernos de Panamá, Perú y Costa Rica, han suavizado desde entonces su posición y han dicho que reconocerían las elecciones, abriendo un camino hacia la normalización de la situación en el país
Fuente: Reuters
No hay comentarios:
Publicar un comentario